Prevención, información y sensibilización.
FundHOS promotor del cuidado de la salud mental, especialmente en la infancia y adolescencia, ha celebrado este año el Día Internacional de la Salud Mental con dos actividades de prevención y sensibilización.
Charla ofrecida a los cursos de la ESO del CEIPS Villa de Cobeña.
Marta López Adroher, coordinadora del Proyecto Ombú de atención psicológica que la Fundación desarrolla desde el año 2015, ofreció a los estudiantes pistas para identificar un problema de salud mental, a quién y cómo solicitar ayuda y planteó proyectos que, como el nuestro, son un recurso de atención y apoyo al que dirigirse en caso de necesitarlo.
El aumento de hasta el 47% en los trastornos de la salud mental de los niños, niñas y adolescentes, es un dato preocupante que nos sirvió de foco del discurso.
Los chicos y chicas debatieron un reciente artículo que ponía de manifiesto que <<Los menores de edad trasladan tristeza, frustración, miedo y dificultad para gestionar las emociones. Y cuando las han podido verbalizar no se han sentido suficientemente acompañados por personas de su entorno>>
¿Qué pasa con nuestros adolescentes? ¿Saben gestionar sus emociones? ¿Se sienten acompañados?
Si soy adolescente y me siento mal, ¿cómo puedo pedir ayuda?
En muchas familias y ambientes parece que pedir ayuda al psicólogo es sinónimo de estar loco, ser débil, no tener fuerza. Esta realidad es normal que genere soledad y que haga que los chicos y chicas se aíslen más, se sientan inseguros o no tengan ganas de pedir ayuda.
Tuvimos valientes entre público que se atrevieron a reconocer sus propias dificultades ante lo que Marta respondió “mi experiencia personal y profesional ha sido, que, si bien las relaciones tienen el poder de dañar, también lo tienen de curar. Por tanto, sabiendo que no somos culpables de nuestras marcas, si somos responsables de lo que podemos hacer con ellas a partir de una buena ayuda. Ese es el objetivo de la psicoterapia.”
Marta ofreció cuatro claves para atender a la salud de los adolescentes:
- Poder hablar con los padres sin rodeos para expresar que necesitan apoyo externo.
- Puede pasar que no sepan o no puedan expresar cómo se sienten porque tal vez no lo entiendan, pero este hecho no significa que no necesiten ayuda.
- A veces, los adolescentes llegan a sentirse cuestionados por querer pedir ayuda, sienten que minimizamos sus problemas.
- Debemos crear espacios seguros donde los chicos y chicas puedan confiar.
Contamos en este acto con el apoyo de Susana García-Arias Vállez, directora de la Residencia de personas con enfermedad mental que Grupo5 gestiona en Cobeña.
Susana se centró en romper los prejuicios y estereotipos que se suelen tener ante personas que padecen alguna enfermedad mental “Igual que necesitamos gafas para ver porque la vista nos falla, puede pasar que necesitemos apoyo psicológico porque tengamos una enfermedad mental en algún momento de nuestra vida.”
Visita a la Residencia de personas con enfermedad mental de Cobeña.
El grupo de primaria del Proyecto Puentes fue invitado a una tarde de encuentro y juegos en la residencia de personas con enfermedad mental de Cobeña.
Los residentes habían diseñado una jornada de actividades que no llegamos a realizar porque era tanta la curiosidad y las ganas de conocerse que estuvieron visitando instalaciones, compartiendo juegos e incluso lecturas. El tiempo se pasó volando y ambas partes se quedaron con tantas ganas de más que vamos a repetir siempre que sea posible.
Este tipo de actividades genera una emotiva integración, niños y niñas que llegaron con inseguridades y miedos ante un colectivo desconocido y que salieron con una sonrisa enorme y sintiéndose parte de algo.